Paseo desde Estonia, una de las tres exrepúblicas soviéticas bálticas,
hasta San Petersburgo. La segunda ciudad más importante de Rusia.
Tallin.
Estonia.
A
Tallin podríamos denominarla “La Andorra del Báltico”, porque a Tallin se va a
comprar. Exquisitas tiendas de marca, restaurantes, mercadillos…, te encuentras
por doquier. El idioma principal es el estonio,
pero Estonia es uno de los pocos países de la Unión Europea
con un sistema escolar multilingüe financiado por el Estado. Bastantes
escolares y universitarios estudian en lengua rusa. Aunque son una gran y
aislada comunidad rusa, el estado está poniendo medios para integrar estos
grupos en la sociedad. Pero bueno, con el
inglés te desenvuelves muy bien.
En Tallin descubrí una cuidad
de cuento, con arquitectura medieval de tejados de aguja y calles adoquinadas.
Sus calles son hermosas, coloridas, limpias, con
un estilo elegante e ideales para pasear. Flota en el aire una brizna de magia.
En la gran plaza central, en la plaza del Ayuntamiento, se colocan a diario
cientos de puestecitos con artesanía típica, de todo tipo, madera, forja y lino. Y sobre
todo ámbar (vendedores ambulantes y tiendas especializadas de ámbar por
todas partes) También animan la plaza los múltiples bares y restaurantes, y
enseguida te fijarás en una tienda especializada en artículos medievales, como
ropa, calzado, hierbas medicinales...y olor a incienso…
En
esta plaza también se encuentra la farmacia más antigua
de toda Europa (data del siglo XV) y algunos bares donde las camareras
van vestidas como taberneras de la época medieval (resulta mágico)
El
Ayuntamiento es el único ayuntamiento de estilo gótico en
el norte de Europa (Que fue bombardeado en el 44 y reconstruido en el 50).Desde
esta plaza, por un pequeño callejón, se llega a la Iglesia
del Espíritu Santo (Pühavaimu kirik). En la pared de esta iglesia está
el reloj público más antiguo de Estonia.
También
desde la Plaza del Ayuntamiento, siguiendo por la calle Viru (que es la calle
más comercial de la ciudad vieja) donde se vive aún un ambiente medieval y,
como ya he dicho, mágico. Hay talleres de artesanos y artistas.
No
lejos está el interesante y bohemio "Patio de los
Maestros" donde se venden artesanías, piezas de joyería y productos
de chocolate.)
Se llega a las dos torres de la puerta de entrada a la ciudad.
Aquí comienza la cuidad moderna con hoteles, centros comerciales… Alrededor de
estas torres aún hay mercadillos de ropa tradicional de Estonia. 
En los alrededores recomiendo visitar, además de la muralla, el Museo Etnográfico de Rocca al Mare, que es al aire libre, donde conocer y comprender mejor las costumbres y cultura de la cuidad y sus gentes. El recorrido se puede hacer en bicicleta con lo que resulta, además de interesante, divertido.
Se llega a las dos torres de la puerta de entrada a la ciudad.
Aquí comienza la cuidad moderna con hoteles, centros comerciales… Alrededor de
estas torres aún hay mercadillos de ropa tradicional de Estonia. 
En los alrededores recomiendo visitar, además de la muralla, el Museo Etnográfico de Rocca al Mare, que es al aire libre, donde conocer y comprender mejor las costumbres y cultura de la cuidad y sus gentes. El recorrido se puede hacer en bicicleta con lo que resulta, además de interesante, divertido.
La gastronomía de Tallin es
una combinación entre la cocina
escandinava, rusa y alemana. Teniendo el mar Báltico a tiro de piedra, el
pescado está presente en los platos más típicos. Es muy tradicional la comida
de puchero en invierno y las ligeras ensaladas en verano. Pero por nombrar
platos típicos que no podéis dejar de probar…Por ejemplo: Arenques en vinagre, con patatas, (las patatas
(Kartulid) son un alimento importantísimo en la gastronomía de Estonia. Los
restaurantes especializados en comida tradicional sirven platos como las manos
de cerdo (sült), la salchicha estofada (sauerkraut), la sopa de guisantes y el
verevorst o verivorst, una especie de embutido fresco similar a nuestra morcilla,
elaborado con carne y sangre de cerdo (más típico en navidad), además, todas
las comidas suelen ir acompañadas del tradicional leib o pan negro de centeno. Anguila marinada.
Un
restaurante muy típico, es el Olde Hansa es
famoso por su ambiente medieval y por incluir en su menú platos elaborados con
carne de oso y reno. Acompañándolo
de la típica cerveza, Saku, cerveza tradicional de Estonia, fabricada en el
país.
Los
habitantes de Tallin, y Estonia en general, se caracterizan por el tener un pluralismo
cultural, fuertes valores comunes, y el deseo de conservar y desarrollar la
cultura estonia. Orgullosos de lo suyo.
No te puedes perder en Tallin:
La Catedral Ortodoxa de Alejandro Nevski.
El Castillo de Toompea. (Erigido sobre la colina de piedra caliza de Toompea, en la parte central de Tallin.)
La Universidad de Tartu (es la universidad más antigua de Estonia.)
TALLIN.
La
distancia entre Tallin y San Petersburgo es de
unos 350 km.
Desde
Tallin a San Petersburgo se puede viajar en avión o en autobús. LUXEXPRESS
me parece la compañía más recomendable por comodidad. Actualmente no
existe un tren entre Tallin y San Petersburgo.
San Petersburgo: Una
de las ciudades más hermosas del mundo.
Idioma:
ruso.
San Petersburgo es una ciudad llena de
historia de los zares rusos, intrigas de
la corte y revoluciones. Debido a sus avatares políticos, la ciudad cambió de
nombre varias veces y es conocida también como Petrogrado y Leningrado.
San Petersburgo Impresiona, es
un lugar sumamente atractivo y cautiva con sus numerosos ejemplos
arquitectónicos, museos, palacios, parques, anchas avenidas, puentes
espectaculares y refinados monumentos. San Petersburgo fue la capital del
Imperio Ruso durante 206 años, su arquitectura tiene mucha influencia italiana,
francesa y holandesa. Es impresionante
que cualquier estación de metro de San Petersburgo sea una obra de arte. Como
estar en un museo. El centro histórico de San Petersburgo ha sido declarado
Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Yo considero San Petersburgo un lugar
ideal para empezar a conocer Rusia moderna, la gente y la cultura rusa en
general.
Degustar
platos típicos como: ensaladas (pelmeni), crepes
(blinis), ternera (Stroganoff), sopas (Borsh) o (Soliánka)…Sin olvidarnos del
Caviar negro (beluga y esturión) o el Caviar rojo (de salmón) ¡Qué delicia!
Los habitantes de San Petersburgo,
son tan cordiales y de buena voluntad, y
tan hospitalarios que es inevitable hacer nuevos amigos.
Ellos, nunca beben el vodka mezclado con otras bebidas sino solo. Bebido en vasitos pequeños (tipo chupito) No lo toman con hielo, sino bien frio (la botella se enfría entera) Se bebe acompañado de entremeses (zakuski) pronunciando muchos brindis. Cada chupito un brindis (tost). Se brinda por "las damas", por "nosotros" o por alguien en concreto, por “que todo vaya bien” etc. El brindis más habitual es "Na zdoróvie" (¡Salud!).
Tanto el Hermitage viejo, como el nuevo, es una visita imprescindible
para los amantes del arte y la cultura. En ellos encontramos una grandísima colección del mejor arte. Existe, por ejemplo, una permanente exposición de
pintura italiana y una
colección de pintura española considerada como una de las mejores fuera de las
fronteras de España. En ella se puede ver obras de El Greco, Velázquez, Ribera,
Zurbarán, Murillo y Goya. Esta riquísima colección de pintores españoles del
siglo de oro pertenece al banquero Coesvelt.
Edificios que no te puedes perder:
Aunque en realidad San Petersburgo es una ciudad para hacer turismo
cultural, también hay actividades muy entretenidas. Por ejemplo: Un paseo en barco por el río Neva o
disfrutar de las vistas desde sus orillas, es muy placentero. O ver la elevación
de los puentes iluminados sobre el río por la noche, o durante el día, es un
espectáculo muy famoso, único y característico de San Petersburgo, que atrae a
miles de personas. En verano, disfrutar de “las noches blancas” cuando, como en
Finlandia, apenas oscurece. Pasear
por el Barrio de Dostoevsky, es pasear sintiendo el espíritu del viejo San
Petersburgo ¡Lo recomiendo!
Ellos, nunca beben el vodka mezclado con otras bebidas sino solo. Bebido en vasitos pequeños (tipo chupito) No lo toman con hielo, sino bien frio (la botella se enfría entera) Se bebe acompañado de entremeses (zakuski) pronunciando muchos brindis. Cada chupito un brindis (tost). Se brinda por "las damas", por "nosotros" o por alguien en concreto, por “que todo vaya bien” etc. El brindis más habitual es "Na zdoróvie" (¡Salud!).
El Palacio de Invierno fue construido para la emperatriz Isabel,
hija de Pedro el Grande, y sus fachadas, el interior de la iglesia palaciega y
la majestuosa escalera principal son un ejemplo del llamado barroco ruso del
siglo XVIII. No así su interior, que al haberse reconstruido tras un incendio
acaecido en el siglo XIX, se hizo a usanza de la época. La sala Malaquita; que
combina el enérgico color verde de la malaquita con el pan de oro de sus
ornamentos y el tapizado del mobiliario,
con seda de color granate, hacen de esta sala una visión extraordinaria. Sus
columnas, pilastras, chimeneas, lámparas de pie, mesitas…Todo está decorado con
malaquita de los montes Urales.
El Palacio de Invierno era la
residencia principal de los zares rusos, razón de su particular opulencia. En
cambio, el Hermitage Pequeño fue construido para la vida
privada de Catalina II. La emperatriz quería descansar de la vida oficial en un
lugar más acogedor. Por ese motivo el palacio fue denominado “Hermitage”
(que, en francés, significa “ermita) y a él solamente podían acceder sus
invitados personales.
Tanto el Hermitage viejo, como el nuevo, es una visita imprescindible
para los amantes del arte y la cultura. En ellos encontramos una grandísima colección del mejor arte. Existe, por ejemplo, una permanente exposición de
pintura italiana y una
colección de pintura española considerada como una de las mejores fuera de las
fronteras de España. En ella se puede ver obras de El Greco, Velázquez, Ribera,
Zurbarán, Murillo y Goya. Esta riquísima colección de pintores españoles del
siglo de oro pertenece al banquero Coesvelt.
En
la Avd. principal, Avenida Nevsky, también tenemos la
Catedral de Nuestra Señora de Kazan (es la iglesia catedral principal de
la ciudad al ser la sede del obispo ortodoxo de San Petersburgo) y, justo en
frente, está la librería más famosa de San Petersburgo. La Casa del Libro, un edificio modernista construido en los años
1902-1904 para la conocida empresa alemana de máquinas de coser
"Zinger". Después de la revolución, en este edificio se abrió la
"Casa del Libro".
Edificios que no te puedes perder:
El
Palacio de Catalina en Pushkin.
Palacio
de Pavlovsk. (Ambas, residencias
veraniegas de los zares)
La
Iglesia de Salvador sobre la Sangre Derramada (Ahora museo)
Pero también se puede ir de compras, las
tiendas abren los siete días de la semana normalmente de 10.00h. a 20.00h. o
22.00h. Algunas tiendas de alimentación (magazín), cafeterías, supermercados (supermarket)
están abiertos 24 horas. Los mercados (rýnok) y mercadillos abren cada día
menos, quizá, los lunes. Y encontramos heladerías por doquier!
En
el centro hay muchas pequeñas tiendas del barrio donde comprar subvenir. El
recuerdo más típico ruso es la muñeca "Matrioshka"
(simboliza la maternidad).
Pero
la principal avenida de San Petersburgo y también la calle comercial más
importante, La Avenida Nevsky (Nevsky Prospekt), tan
atractiva en las obras de Gogol (famoso escritor ruso), que empieza en la Plaza
del Palacio (Hermitage) y sigue hasta la Plaza Vosstaniya (Estación de tren de
Moscú). En su recorrido te encuentras con muchísimas tiendas, bancos, restaurantes,
cafeterías, y dos grandes almacenes con gran repercusión histórica en San
Petersburgo y su historia. Son Gostiny Dvor y Passage. Situados uno frente a
otro…Este último tiene inspiración francesa. Allí podemos encontrar a buen precio, vajillas de madera pintada (Jojlomá), porcelana tradicional (Gzhel), chales de
(Pávlovo-Posad) muy típicos. Hay muchas tiendas de Peletería
Pero
también más moderno está el centro comercial Galería.
La céntrica Plaza Sennaya, es
una zona muy concurrida llena de “kioskos”, puestos de comida rápida, terrazas
en verano…, donde hacer un descanso.
