31.10.14

La Habana.


La Habana.
Capital de La República de Cuba.
Es un país donde no hay analfabetismo, todo niño tiene derecho y obligación de ir a la escuela gratuitamente. Los médicos sin ir más lejos son de los mejores del mundo y el acceso a la salud pública es gratuito.
En cuba hay de todo, desde Coca Cola hasta perfumes franceses, solo que no para el pueblo.  El "Bloqueo" es un bloqueo americano que no incluye a Europa, por tanto Cuba negocia con Europa lo que quiere. El bloqueo en sí, desde mi punto de vista, no es una justificación para la situación en Cuba (donde hay dos clases de cubanos, los que tienen acceso al dólar y los que no). Solo viviendo en Cuba, como un cubano, se puede conocer lo que es de verdad vivir sin libertad (de acción y pensamiento) y bajo el miedo constante a todo y a todos. La pobreza es lo más visible, pero no es lo peor, lo peor sucede dentro de las mazmorras castristas, sobre las balsas de los que intentan escapar, en los paredones de fusilamiento, en las turbas organizadas por el gobierno para reprimir a los que quieren pensar  y, en fin, la lucha diaria y constante para sobrevivir en un país donde el único que tiene derechos es el dictador. Para los demás,  libreta de racionamiento.  Los cubanos son ciudadanos de segunda categoría en su propio país. No se les permite entrar en los hoteles, (no podía tomarme un café en la cafetería del hotel con mis amigos cubanos porque no les dejaban entrar, otra cosa es lo que pagan al hotel algunos turistas para subir a las chicas a su habitación, en tal caso la ley por montera) ni en los clubes, establecimientos de negocios o para turistas… y están continuamente asediados por los civiles, que por cualquier motivo les hacen pagar multas o pasar noche en la cárcel. (Esto lo he vivido yo en primera persona cuando un amigo cubano nos llevaba al Tropicana en su coche. Nos detuvo la policía y mientras nosotros ”los turistas” quedábamos en el vehículo a la espera de que lo dejaran libre, él marchaba con los agentes a la comisaria acusado de “jinetear” (dícese de trapichear de cualquier manera con el turista) aunque les dijimos por altiva y por pasiva que no nos había pedido dinero y que era conocido nuestro. Lo devolvieron después de unas horas y de pagar una multa en pesos. Además hay racismo en cuba, sí, y los negros, como siempre, son los más discriminados. En este caso el amigo que nos llevaba era negro.


Pero dejando estos avatares aparte, te voy a hablar de esos rasgos tan atractivos de esta ciudad que tiene tanto nuestro, La Habana de la época española, con sus edificios coloniales y sus gentes que, pese a todo, saben encontrar los momentos de risas y baile, olvidándose por un lapso de tiempo del régimen donde viven inmersos.  Para muestra un botón. En el barrio chino de la Habana, muy fácil de encontrar, está el restaurante “Los tres chinitos” El acceso es muy feo, hay que subir unas escaleras oscuras y empinadas. Entras en un restaurante amplio y luminoso con mesas de manteles de tela de cuadritos y de ambiente muy limpio, donde probar por ejemplo, La langosta en sus diferentes preparaciones, que está espectacular, así como el resto de los platos que ofrecen. La verdad, la comida es bastante buena, en líneas generales, así como asequible en los precios y platos abundantes. Por la noche allí mismo se monta música y baile en un ambiente amistoso. Por supuesto, en el barrio chino, por motivos políticos, ya no quedan ni tiendas chinas, ni chinos.
El Malecón, es la avenida marítima más famosa de Cuba, comprende una amplia avenida de seis carriles y un larguísimo muro de 8 km que se extiende sobre toda la costa norte de la capital cubana. Paseo tradicional, para cubanos y turistas, bonito paisaje del mar y de la ciudad (Aunque las fachadas de las casas están desconchadas) Punto de encuentro de caminantes; sobre todo los fines de semana, que se reúnen las familias y amigos, ponen música y comen y beben cerveza “Cristal” (la preferida de los cubanos). Recomendable este paseo para la gente que no solo busca hacer turismo sino conocer lugareños y costumbres.
El casco histórico es La vieja Habana.
Donde antiguas construcciones coloniales fueron demolidas para levantar otras, imponentes, con fachadas neoclásicas. Por tanto, ahora hay una mezcla de edificaciones coloniales (de la época española) y  neoclásicas.
La Plaza vieja: Es una hermosa plaza donde se pueden encontrar pinturas, libros, artesanía, ron, puros, (estos dos últimos recomiendo comprarlos en locales legales de lo contrario puede ser una decepción). Te puedes encontrar cantidad de lugareños queriendo que les des dinero, a veces a través de engaños. Los vendedores ambulantes son muy insistentes y molestos. (Pero claro, no es la única ciudad del mundo donde pasa esto. Lo interesante es llevar el bolso a buen recaudo y no dejarse liar, aunque siempre comportarse con buenos modos) En la plaza vieja puedes encontrar la fábrica de cerveza y malta, el café El Escorial con el mejor café de la Habana, el Planetarium


La Catedral de la Virgen María de la Concepción Inmaculada de La Habana, es un templo católico de estilo colonial, que se encuentra en el corazón de La Habana Vieja, en la zona más antigua de la ciudad, declarada por la UNESCO en 1982 Patrimonio de la Humanidad. Como la mayoría del tiempo está cerrada recomiendo visitar en su lugar  la Iglesia de la Merced y la de Francisco de Padua, muy interesantes en el tema arquitectónico, ambas son dignas de ver. Está al lado el restaurant El Patio, ubicado en el patio, de ahí el nombre, del antiguo palacio del Marqués de Aguas Claras, un hermoso edificio del siglo XVIII en la Plaza de la Catedral. (Donde puedes degustar exquisita comida cubana e internacional escuchando música de piano en directo, entre columnas y plantas verdes, con una fuente central) Muy romántico… A  la vuelta de la esquina se encuentra la famosa y antigua Bodeguita del Medio donde solía ir Hemingway (donde probar uno de los mejores mojitos de tu vida o un especial cubalibre, a mí me sorprendió lo pequeño que era el local, pero, por supuesto, emblemático) El Palacio de los Capitanes Generales y el Castillo de la Fuerza merecen una visita.

 

El Capitolio es una de las edificaciones más emblemáticas de la Habana... Inspirado en el Capitolio de los Estados Unidos, el edificio blanco de estilo neoclásico, presenta una fachada de  gigantes columnas dóricas y una alta cúpula. Bonita e interesante visita interior.



La casa Fuster: Fusterlandia: Fuster no es un artista solo de galería, su mayor y mejor obra es su entorno, su casa, las casas vecinas, el consultorio médico, la parada del ómnibus , todo su entorno lo ha convertido en una gran galería a cielo abierto y gratuita a todo visitante, vale la pena visitarla .Se trata de una casa gigante toda decorada en pequeños azulejos de colores (con el método que denominamos aquí de “trencadis” tipo mosaico) Es también su taller, donde trabaja su familia. Cuando recorres todo ese barrio, te sientes como andando por una obra de arte. Cerca está la casa de Fidel.

El Morro: es una fortaleza inmensa y con tantos misterios y recovecos que cada visita es especial. Subir al Faro vale la pena, aparte todavía funciona y es impresionante ver su mecanismo interno.  A unos pasos de ahí se encuentra La Divina Pastora, uno de los mejores restaurantes ahora mismo en La Habana. Rodeado por un jardín. Con una vista magnífica de la ciudad. Donde contemplar una espectacular puesta de sol. Ideal para cenar en plan romántico o con amigos.



 Para espectáculo el de Tropicana. Una vez en La Habana, no te puedes perder este estupendo entretenimiento (aunque el precio sean 100 euros bebida incluida) con más de 70 bailarines, cantantes y personal de la orquesta, que con su música y sus bailes te trasmiten unas ganas inevitables de bailar. Como estos amigos nos consiguieron entradas para una mesa en primera fila, al final del show, nuestra amiga “My lady” (bailarina del Tropicana), nos sacó al escenario a bailar…así que, que te voy a contar…inolvidable.
El Floridita, un bar y restaurante del centro de La Habana, se hizo mundialmente famosa gracias al escritor Ernest Hemingway quien lo visitaba con regularidad y ha terminado por convertirse en el principal atractivo turístico del local, porque en él se encuentran una estatua de Hemingway acodado en un extremo de la barra.
Bahía Hemingway, discoteca,  llamada así, también, por el célebre escritor Ernest Hemingway, el cual vivió durante más de veinte años en La Habana,  a solo 20 minutos de La Habana Vieja, este area, además del museo Hemingway, tiene muchas ofertas: supermercados, boutiques, tiendas de tabaco, restaurantes, discotecas, deportes acuáticos, piscinas de agua dulce y de agua salada, y vistas maravillosas. Además, la Marina Hemingway se encuentra a solo 5 minutos en taxi de La Habana.
De mi viaje mi playa favorita es Mar Azul, que está en las playas del este de La Habana (por encima de varadero, cayo coco o playa ancón..) Porque es limpia, color turquesa, arena blanca, con chiringuitos, tumbonas parasoles, ambiente cubano y música en directo.  Es uno de los pocos sitios donde se juntan cubanos y turistas para disfrutar de la zona, está lleno de policías que vigilan y puedes ir en autobús: Via Azul por 5cucs ida+vuelta (el último para volver las 18h) o a lo cubano: almendrones=coches de los 50 por 1cuc. Los grupos musicales se van moviendo por la playa para quienes quieran pagar por canción (es negociable). Es una divertida manera de conocer gente. No te recomiendo que abras una cuenta en el chiringuito que te trae la bebida, procura pagar cada consumición y así será más fácil controlar y que no te cuelen más.
Para comer también están: Café del Oriente: Al lado de la Lonja del Comercio, está instalado en una preciosa casa de dos plantas con altos ventanales, en una esquina de la Plaza de San Francisco. Con la apariencia de un antiguo café de Paris, está decorado de forma suntuosa mezcla del lujo de los zares de Rusia y de la época de Batista. La gestión es gubernamental y por lo tanto los empleados no trabajan con el mismo empeño que el de los paladares privados. Buena comida y música (en vivo) de pianista, de fondo.
Algunas paladares (en Cuba para designar a restaurantes montados y dirigidos por cuentapropistas, las paladares están sometidas por parte del gobierno cubano a limitaciones relativas a la cantidad y tipo de productos que pueden ofertar, la contratación de mano de obra y el número de asientos que pueden disponer) han alcanzado renombre internacional por su calidad y lo sólido de su propuesta gastronómica. Nombres como "La Guarida”, “La Fontana” o "Gringo Viejo" son obligada referencia para los que buscan dónde comer en La Habana. Donde poder degustar platos propios cubanos. Congri: (Plato preparado con arroz frito, frijoles, cebolla y tocino) Moros y cristianos: Plato típico hecho a base de mezcla de arroz con frijoles. O El plato más usual y simple para los cubanos que es el formado por arroz, frijoles y pollo.
Pero también comí en el comedor de una de esas casas coloniales un pollo a la criolla, que es una sopa preparada con carne de pollo y vegetales como patata, tomates y cebollas, especialmente bueno y de postre plátano frito, en un ambiente muy familiar y una sobremesa llena de conversaciones muy interesante aderezadas con Cocada: Dulce hecho a base de coco, azúcar y aceites. Y su típico café muy dulzón.
Donde alojarse:
La oferta de Hoteles es diversa. Muy recomendables: NH, Meliá, Saratoga, Nacional…
También, alojarse en una habitación privada es una excelente opción para viajeros independientes, ya que suele resultar económico y confortable. Además es una forma magnífica de conocer de primera mano cómo es la vida cotidiana de los cubanos. Los propietarios acostumbran a ser excelentes guías turísticos. La Habana, y la Isla entera, está plagada de este tipo de alojamientos, casas coloniales. El precio suele rondar entre los 15 y los 45 CUC (peso convertible) Estas casas particulares reciben frecuentes inspecciones gubernamentales para garantizar que la casa está limpia, sea segura y tenga todas las comodidades para el turista. (Las dueñas de estas casas suelen ser madres de algún funcionario del régimen…etc. Porque los más de los cubanos viven en casas de cuatro paredes, con cristales de las ventanas rotos sin medios para arreglarlos y con suelo de tierra, o azulejos también rotos.
Los campismos, o campings, se clasifican en nacionales e internacionales. Los campismos nacionales en teoría son solo para los cubanos; mientras que los internacionales admiten también a los turistas y cuentan con mayores comodidades como aire acondicionado. De estos últimos hay unos doce en todo el país, algunos de ellos poco tienen que envidiar a la calidad de un hotel, y suelen costar entre 10 y 30 CUC por cama y noche.
El centro Habana alberga lugares tan emblemáticos, además de los ya citados, como el Museo de la Revolución, el Museo Nacional de Bellas Artes, el Paseo de Martí o el Castillo de San Salvador de La Punta. El Gran Teatro de La Habana García Lorca, sede del Ballet y de la Ópera Nacional de Cuba también se encuentra emplazado en Centro Habana, sobre el Paseo de Martí, justo al lado del Capitolio Nacional de Cuba.
Las principales plazas de este sector de La Habana son las de Armas, de San Francisco, la Vieja, la del Cristo y la de la Catedral.
Los castillos son el de los Tres Reyes Magos del Morro, el de la Real Fuerza, el de San Salvador de la Punta y el de Atares. Su más notable fortaleza es la de San Carlos de la Cabaña.
En la famosa Plaza de la Revolución, frente al Memorial José Martí (Cuyo mirador, obsequia con una maravillosa y general vista de La Habana) Mural del Che: Sin duda este enorme mural es la imagen y símbolo más conocido de Cuba. Se halla en la fachada del Ministerio del Interior y representa, con líneas simples, la imagen gráfica del héroe nacional y revolucionario cubano, Ernesto Che Guevara, realizado enteramente en acero fundido negro por Enrique Ávila (pintor, diseñador, escultor y grabador), que utilizó como modelo la foto más conocida del Che, captada por Korda; junto a la imagen se encuentra su eslogan más conocido: "Hasta la victoria siempre".
Las propinas…recomendable dejar propina:
En el taxi, a menos que se haya pactado una cantidad, que para mí es lo más recomendable.
A la persona que cuida los aseos.
Al músico que ameniza la comida o cena en los restaurantes.
Al guía de una excursión…etc.
Que documentos se necesitan para viajar a cuba:
El Pasaporte, visado de turista que permite la estancia por 30 días (ampliable a 30 días más dependiendo del motivo), seguro médico, billete de vuelta y dirección real y demostrable de dónde vas a estar alojado.
Hacer la botella: Hacer autoestop. Está permitido y es una manera habitual de trasladarse de un lugar a otro en la ciudad y alrededores.
Cuidado con…Jinetera: Prostituta. Jinetero: Acosadores de turistas que consiguen dinero a través de la picaresca.
Moneda: La isla cuenta desde 1994 con dos monedas. El peso cubano (CUP), en el que se pagan los salarios y las jubilaciones, y el peso convertible (CUC), cuyo cambio está equiparado al dólar y es 25 veces superior al del CUP.  Es importante mencionar que el cambio de dólares estadounidenses a pesos convertibles está sujeto a un impuesto del 10%; mientras que el cambio a otras divisas como euros, libras o dólares canadienses están libres de ese impuesto. Se aceptan las tarjetas. Y los cheques de viaje (Los cheques más seguros son los de Thomas Cook.)
Fiestas que se celebran oficialmente en cuba:
Enero: Triunfo de la Revolución (1 de Enero).Día de la Victoria (2 de Enero). Aniversario del nacimiento de José Martí (28 de Enero).
Abril: Victoria de la bahía de Cochinos (19 de Abril).
Mayo: Día de los trabajadores (1 de Mayo).
Julio: Conmemoración del asalto a Moncada (Del 25 al 27 de Julio).Día de la Rebeldía Nacional (26 de Julio).
Octubre: Aniversario de la muerte del Che Guevara (8 de Octubre).Día de la Independencia (10 de Octubre).Aniversario de la muerte de Camilo Cienfuegos (28 de Octubre).
Diciembre: Aniversario de la muerte de Antonio Maceo (7 de Diciembre).Navidad (25 de Diciembre).Nochevieja (31 de Diciembre).




















Milán

¡Por fin una escapada a Milán! después de tantos años que lleva proponiéndome la experiencia mi querido amigo Claudio. Sí, es cierto, quiz...